
Este otoño he descubierto las mechas californianas. Hace tiempo que actrices y modelos tan conocidas como Gisele Bündchen, Sarah Jessica Parker o Jessica Biel las lucen pero no tenía ni idea de en qué consistía el secreto. Pues bien, para las que no lo sepáis se trata de unas mechas que van degradadas desde la raíz a las puntas de tal manera que parece efecto del sol y del verano. Si asoma la raíz, el efecto es natural. Es un tipo de mechas que pretender captar un toque rubio en las puntas, copiando el estilo surfista característico de las playas de California.

A mi personalmente me encantan y aunque para algunos el handicap de estas mechas es que sólo se pueden lucir en los meses de verano porque nadie se cree que tengas el pelo así en pleno otoño, yo no estoy de acuerdo y es que las sigo viendo a muchas chicas en la calle, y a amigas que las han estrenado a punto de empezar noviembre, y creo que además de aportar luminosidad al cabello también dan más color al rostro ahora que por desgracia tenemos que despedirnos del bronceado.

De modo que las considero perfectas para verano e invierno y para una chica como yo con el pelo muy negro son ideales para cambiar el look sin que importe que se vean demasiado las raíces. Todavía recuerdo mi primer y único contacto con el tinte, la por entonces tan de moda henna, mi pelo quedó del color de una zanahoria y las mechas me salieron prácticamente al día siguiente. La insistencia de mi madre en que me diera un baño de color en negro y el hecho de que mis raíces negras crecieran a la velocidad de la luz me llevaron a la peluquería y a no volver a pensar en teñirme el pelo de nuevo.

Pero reconozco que el auge de las mechas californianas me ha llevado a replantearme ese cambio de imagen que a todas nos apetece de vez en cuando para no verte siempre igual al mirarte al espejo. El éxito de esta técnica es que se puede aplicar independientemente del color base del cabello. Es espectacular en melenas o medias melenas de pelo oscuro, con unos resultados más naturales que las mechas tradicionales.
Además el efecto raíz deja de tener importancia, lo cual simplifica mucho el proceso para las que tienen que teñirse el pelo con regularidad. La técnica es muy antigua, ya que se remonta a los años 70 y a pesar de su nombre no nació en California sino en París. Fueron creadas por el peluquero Jean Dessange, quién ideó una fórmula para darle luz a la melena y así suavizar las facciones del rostro simulando un aclarado del sol.

Otra ventaja es que el precio de las mechas se ha reducido considerablemente después de que tantas y tantas famosas las luzcan en sus envidiables melenas. Eso sí, el proceso de degradado no es sencillo por eso siempre es mejor apostar por un centro de confianza, pero si antes el precio de las mechas californianas rondaba los 120 euros ahora lo puedes hacer incluso por la mitad.
Si estás pensado en un cambio de look esta es una buena opción y es que el efecto de estas mechas degradadas es inmediato, el cabello se ilumina con un golpe de sol que suele sentar muy bien a cualquier tipo de rostro.